Gracias a su capacidad para retener la humedad, la glicerina se convierte en un ingrediente versátil con numerosas ventajas cuando se añade a la rutina de cuidado del cabello: mejora de la elasticidad, hidratación muy necesaria y reducción del encrespamiento, por nombrar algunas.

En un estudio realizado para determinar su eficacia en la reducción de la caspa, se llegó a la conclusión de que un tratamiento sin aclarado utilizado durante un periodo de 8 semanas provocaba una reducción significativa de la caspa. ¿Un ingrediente milagroso? Puede que no. Resultados notables. Sin duda.

Sin embargo, es importante elegir productos que contengan glicerina con moderación y ser consciente de cómo las condiciones ambientales -como la humedad, de la que hablaremos más adelante- pueden afectarla.

Del mismo modo, si se opta por una versión de producto DIY, hay que tener en cuenta que nunca se debe utilizar glicerina sin diluir. Es necesario mezclar la glicerina con agua, aceites u otros sérums para asegurarse de que no se convierta en una pasta, o en un potenciador de grasa sobre el cabello. Muchos recomiendan elaborar un spray que actúe como tratamiento sin aclarado. La composición de esta solución podría ser la siguiente: 2 cucharadas de glicerina, ½ taza de agua y unas gotas de tu aceite esencial favorito. Tanto si lo haces tú mismo como si lo compras, los beneficios son los mismos.