El cabello de cada persona es diferente y no hay nada malo en tenerlo fino. Si tu cabello es fino, desconfía de los productos que lo apelmazan. Una espuma de peinado ligera, por ejemplo, funcionará mucho mejor que un aceite o una crema y, además, aportará textura. Si quieres utilizar un aceite o una crema, aplícalo sólo en las puntas del pelo, en lugar de a lo largo de todo el tallo.