Mascarilla de aceite de coco
Calienta dos cucharadas de aceite de coco y aplícalo sobre el cabello húmedo o seco. Envuelve tu cabello en una toalla de microfibra y descansa con ella puesta durante la noche. Por la mañana, aclara la mascarilla con tu champú favorito y deja que el cabello se seque al aire. Si te resulta demasiado incómodo dormir con algo en la cabeza, aplícate aceite de coco en el pelo y déjalo actuar durante al menos siete horas algún día que tengas más tranquilo.
Mascarilla de aceite de oliva y miel
Combinar tres cucharadas de aceite de oliva y una cucharada de miel. Mezclar hasta que esté suave, añadiendo más aceite si es necesario. Lávate el pelo y déjalo secar completamente antes de dividirlo en secciones y aplicar la mezcla. Deja la mascarilla durante unos 30 minutos, luego aclara con agua tibia y procede al peinado.
Mascarilla de yogur
Añade una cucharada de aceite de oliva a una taza con yogur. Aplica la mezcla a tu cabello, déjala actuar durante 10 minutos y aclara con agua tibia para conseguir una dosis extra de brillo y firmeza para tu cabello dañado.
Mascarilla de azúcar moreno y aceite de coco
Combina dos cucharadas de azúcar moreno y una cucharada de aceite de coco. Mézclalos y aplícalo inmediatamente después del champú, insistiendo en el cuero cabelludo. Aclara y aplica tu acondicionador favorito.
Mascarilla de aguacate y aceite de oliva
Triturar la mitad del aguacate en un bol con un tenedor y añadir el aceite. Mezclar hasta que quede cremoso y aplicar la mascarilla sobre los largos, concentrándose en las puntas. Dejar actuar al menos media hora antes de aclarar.